El pasado mes de diciembre estuvimos en la exposición ‘’Cespedosa’’ del premio nacional de fotografía 2015 Juan Manuel Castro Prieto, Licenciado en Ciencias Económicas y miembro de la agencia Vu, en el centro social autogestionado ‘’La Tabacalera’’ en Madrid.
El proyecto de Castro Prieto gira en torno a la reconstrucción de su memoria, en forma de historia gráfica de 39 años de producción fotográfica. La exposición se centra en Cespedosa de Tormes, un pequeño pueblo de la provincia de Salamanca, donde nacieron y vivieron los progenitores del autor.
Es el lugar de referencia de su entorno vital, y descubre un lugar para explorar y ensayar con la fotografía a lo largo de los años, Su trabajo se reafirma con el paso del tiempo, y da lugar a todo un recorrido entorno a diferentes formas de fotografiar, una manera de fotografiar cuyo origen está en otros muchos trabajos y a la vez, núcleo reconocible y palpable basado en la manera de mirar de este artista.
A través de muchas fotografías, unas 200 agrupadas en seis apartados que se complementan con 3 vídeos, Castro Prieto nos muestra una Cespedosa que trasciende la mera descripción fotográfica y que va más allá del documentalismo al uso, que actúa como lugar mágico para el autor donde da rienda suelta a sus pulsiones creativas.
La Tabacalera es un centro social autogestionado donde se usa su espacio para teatro, música, danza, pintura, conferencias, reuniones, audiovisuales, talleres, eventos, intervenciones en el barrio… Era una antigua fábrica de tabaco, de ahí su nombre, hoy en día reconvertida en como la conocemos, conservándose todas las instancias como eran entonces, con muchos elementos con los que contaban, maquinaria, tubos de conducción etc.. Que forman ya parte de la esencia de ese sitio, de lo que es y en su día fue.
Lo que más me gustó y me llamó la atención de la exposición fué en su última sección ‘’Una cierta luz’’ del 2007-2016, donde me gustó mucho su juego con distintos desenfoques en diferentes zonas de la fotografía gracias a la cámara de gran formato, casi imposibles de hacer con ninguna otra cámara, con las que hizo sus exposiciones.
Por eso he elegido la siguiente fotografía que está metida en esa sección de fotos, donde se puede ver a una pareja mayor que se intuye que puedan ser los dueños de esa tradicional tienda de barrio. La fotografía transmite tranquilidad y normalidad por la posición de las personas, en color, el encuadre que utiliza, la iluminación difusa que parece ser de la ventana a la izquierda de la foto, y parece que no hay más fuentes de luz a parte de la ventana.
Esta foto está hecha con una cámara de gran formato, que produce varias zonas de desenfoque, por sus angulaciones de la propia cámara que lo produce, por ejemplo en la silla en primer plano en la esquina derecha y luego en el fondo en la puerta.
La posición de las personas mayores esta en uno de los puntos fuertes de la imagen y en la parte derecha de la fotografía es donde más detalle hay, está la foto como dividida en dos zonas, una la que más detalle tenemos y otra donde está la pareja.
Es una foto que tiene perspectiva y la encasillamos en el género social.
Tiene un punto de interés destacable que son las personas mayores sentadas.
La fotografía no tiene un gran contraste pero sí muchas zonas iluminadas y en sombra, y con muchas tonalidades pero un ambiente neutral sin saturaciones pronunciadas.