El trabajo de los fotoperiodistas ha estado siempre cuestionado por lo éticamente correcto en algunos aspectos mas concretamente en el fotoperiodismo de guerra, confictos sociales etc,
Cuando hablamos de lo éticamente correcto nos referimos a lo correcto o equivocado del comportamiento humano. Además, tiene como centro de atención las acciones humanas y aquellos aspectos de las mismas que se relacionan con el bien, la virtud, el deber, la felicidad y la vida realizada.
Por eso en reportajes de guerra o conflictos sociales como por ejemplo en los diferentes disturbios sucedidos en España estos años de atrás deribados de la crisis financiera del pais, que sucedian principalmente en manifestaciones, protestas en las calles, desencadenaban a veces agresiones con las autoridades, o entre grupos mismos.
En esos casos los fotoperiodistas fotografiaban escenas de antidisturbios aporreando a personas, gente con sangre en la cara o lanzándo objetos... y se podría ver como que no intercieden en esas agresiones y esos hechos, sólo se limitan a contar lo que esta sucediendo.
En guerras los fotoperiodistas tiene la misma función que es la de contar lo que está sucediendo. En esas fotografías se pueden suceder escenas que llevan mucho al debate, niños moribundos, soldados apuntando con un arma a personas, y se cuestiona si el fotógrafo no hace nada por evitarlo o ayudar. Yo digo que una manera de ayudar a que se sepan esas situaciones es haciendo esas fotos y
difundiendose en los medios para que se sepa lo que ocurra en el mundo y sensibilizar a la sociendad de las cosas que pasan y que se consiga erradicar esas situaciones, aunque en casos extremos en los que por ejemplo hay un soldado apuntando a otra persona con un arma, yo, intentaría salvar a esa persona, no sé como ni de que manera me encuentre pero me podría mas la humanidad de evitar eso antes de hacer la foto, o hacer la foto y después inmediatamente evitarlo.
En definitiva el debate de lo éticamente correcto en el fotoperiodismo de guerra es desde mi punto de vista contar lo que está sucediendo en ese mismo momento a parte de el debate que se pueda generar, aunque eso no quita que no se ayude al mismo tiempo, la foto es milésima de segundo, y el tiempo que estamos ahí y las cosas que hacemos no se ven, sólo se profundiza la atención en la foto en si, pero tenemos que pensar que detrás de una foto hay una persona y lo demás que haya sucedido, o ayudado a parte de hacer la foto no está contado ni plasmado.
Un claro ejemplo de esto es una fotografía del reportero gráfico Kevin Carter, que trás hacer una foto de un niño moribundo a las afueras de su poblado y un buitre a su lado esperando a atacarlo, La crítica se cernió contra Carter que intentó justificarse, alegando que el niño estaba muriendo y que la tribu se encontraba a unos 20 metros de ella y que el animal esperaba su ración de comida, finalmente le llevó al suicidio.